Me gustan las prostitutas...y mucho. A lo mejor y ese es el motivo por el que he escrito varias, haciendo inventario ya sumo en mis historias a: Teresa, Laura, Adela, Patricia, Lilia, Gabriela, Marisela, Madeleine, Moraima, Ana María, Lucy, Maru y Karina.
Son doce, como los apóstoles, como los meses del año, como las docenas, a todas me ha dado por escribirles una vida y he procurado que se la pasen bien, poco a poco las iran conociendo y estoy seguro que las van a querer también. Pero este post esta dedicado para tres, para las tres primeras, las que viven en el cortometraje OCHO FORMAS DE DECIR TE QUIERO, se llaman Lucy, Maru y la Karina, interpretadas por Laura de Ita, Laura Hidalgo y Vanessa Bauche.
Son tres personajes que me hubiera gustado fueran reales, ellas vivian en el pueblo de Ahualizapan y las conocian todos, el maestro del pueblo, los militares, el ciego, el pobre, el rico, los jóvenes, los viejos... las tres se reunieron en la puerta de la estación de trenes para despedirse de los hombres, después de la noticia de que todos se irian ya nada fue igual, la Lucy descubrió que alguien la quería deveras, ¨como hombre, no como cliente¨, la Maru se atrevió a decir te quiero, al único que la vió por dentro y no por fuera y la Karina comenzó a hacer nuevos planes, porque como ella misma dice: ¨a todo se acostumbra uno, menos a no comer... ya ves, te estoy di y di, la que se enamora pierde...¨.
Yo también perdí, me enamoré de ellas, de las tres, de las doce, de las doce putas, de las doce prostitutas que viven en mis historias.
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