jueves, 24 de mayo de 2007

UN HOMBRE SIN NOMBRE

FOTO: Nuria Lagarde y Zony Maya, en una fonda cochambrosa.

A los feos no nos toca nadie.

Cuando terminé de escribir el primer capítulo del guión de la pelicula TODOS HEMOS PECADO sentí que había alguién esperando a esa mujer que hablaba tan triste (La Chingada Vieja), entonces comencé a imaginar en mi cabeza un personaje que desde su primera visión tenía el rostro de Alberto Estrella, lo que no tenía era un nombre propio, porque nadie le había puesto uno o porque a nadie le importaba si existía o no. Tan solo era un muerto, pero como dice la frase de la película: Y si los muertos aman, después de muertos amarnos más. Ese fue el motivo que me llevó a describir en varias páginas la historia de este HOMBRE SIN NOMBRE que muere, se enamora y muere en un ciclo interminable. Alberto Estrella le dio vida a este hombre muerto y también le prestó el corazón para que se enamorará...
Alejandro Ramírez

martes, 22 de mayo de 2007

LA MUERTE Y LA BUROCRACIA

FOTO: Zony Maya y Nuria Lagarde /
en una noche fria en medio de un set mágico.

Pinche muerte burocrata, te las estoy guardando,
te las estoy guardando, nomás lléname el buche de piedritas...
EL TARUGO

El cielo de TODOS HEMOS PECADO tiene una pequeña peculiaridad, como todo buen sistema organizado padece de la burocracia. Asi es como este personaje en medio de una Central de Autobuses de la Muerte exige sus derechos que el Sindicato le ha ofrecido, "reparto de utilidades, aguinaldo, prima vacacional, seguro social, etcétera, etcétera".

Filmar esta secuencia llena de humor fue una de las más hermosas que tuvimos, en medio de la noche fria junto a una carretera de Izucar de Matamoros en lo que antiguamente fue una estación de trenes, hoy convertida en un casco viejo y de techo semiderruido Gabriela González creó este escenario en donde el actor Mino D´Blanc le dio vida a esta muerte burócrata exigente y gris, acompañado de sus cuatro compañeros sindicalizados también.

Escribir este personaje fue simbolizar la vida mecánica que nunca termina, limitada a las reglas, inclusive más allá de la vida. Una historia de un ser triste que camina triste, habla triste, sueña triste, respira trsite, reclama trsite, vivió triste y muere triste...

Alejandro Ramírez